Parasitólogo de prestigio mundial

Don Carlos Rodríguez López-Neyra de Gorgot, más conocido como el Profesor López-Neyra (Córdoba 1885/Granada 1958), por su consagración a la ciencia es hoy ciudadano del mundo. Con este blog queremos rendir homenaje, en el 50º aniversario de su fallecimiento, a uno de nuestros científicos universales.
El Profesor López-Neyra, fue Director del Instituto Nacional de Parasitología de la Facultad de Farmacia de Granada que, actualmente lleva su nombre, descubrió, entre otros hallazgos científicos, cuarenta y siete nuevas especies de parásitos, más de trescientas nuevas especies en la fauna de la Península Ibérica, creando diecisiete géneros y seis subfamilias.
Ha sido denominado "líder mundial de la Parasitología" según los Profesores Dougherly y Hall de las Universidades de Berkeley y Kansas.

viernes, 3 de febrero de 2012

DON MANUEL MARÍA RODRÍGUEZ Y GARCÍA. DIRECTOR DEL INSTITUTO PROVINCIAL DE CÓRDOBA

por Constantino M. Pleguezuelos.


1.  Don Manuel María Rodriguez y García

Nació en Salamanca el 6 de mayo de 1846. Falleció en Sevilla el 28 de septiembre de 1900. Era hijo de Don Vicente José Rodríguez Bejarano, natural de Cáceres, abogado en las oficinas provinciales de Hacienda de Salamanca, y luego en Córdoba. Su madre fue Doña manuela García Villanueva, natural de Salamanca.
En Córdoba cursó y aprobó la primera y segunda enseñanza. Se graduó Bachiller y Perito Agrícola en Córdoba y, más tarde, Bachiller y Licenciado en la facultad de Ciencias de la Universidad Central.
El año 1865 empezó sus estudios universitarios, él y su hermano Emilio, quien ya en 1900 era arquitecto provincial en Cáceres. El 17 de junio de 1867 se graduó, regresando a Córdoba, junto con Don Manuel Burillo Santiago, su amigo y compañero de estudios (posteriormente, consuegros, ya que Valentina Burillo casó con Luis Rodríguez López-Neyra). Los dos cursos siguientes cursó estudios con Elizalde, Lallave, Gorroño y Cámara. El curso siguiente cursó y aprobó las asignaturas del Doctorado. Terminada la carrera, se dedicó durante algún tiempo a la enseñanza particular y en septiembre de 1868, se crearon varias Universidades e Institutos, tuvo puesto eb Vélez-Málaga, siendo uno de los fundadores más entusiastas.
Posteriormente, tras reñidas oposiciones, obtuvo la cátedra de Matemáticas del Instituto de Figueras, de la cual se posesionó el 7 de febrero de 1873, cátedra que desempeñó por espacio de más de once años, así como el cargo de Secretario de aquel Instituto, donde se recordó su gestión administrativa como un acabado modelo de orden y claridad. Al granjearse la estimación general fue llevado al Municipio de aquella localidad como concejal primero y, más tarde, como síndico y teniente de alcalde, donde trabajó con el mismo afán e incansable celo en provecho de sus conciudadanos.
En 1880 contrajo matrimonio con la señorita Carmen López-Neyra de Gorgot y Deurrieu, nacida el 20 de diciembre de 1850, en la iglesia de San Pedro de Figueras (La Torre Galatea de Dalí, en Figueras, es la casa Gorgot, solariega de los López-Neyra de Gorgot). De dicho matrimonio hubo cuatro hijos:
Manuel (Figueras 2-12-1880). Catedrático de la Facultad de Farmacia de Madrid.
Carlos (Córdoba 12-03-1885). Catedrático de la Facultad de Farmacia de Granada.
Luis (Córdoba 21-09-1887). Ingeniero Agrónomo, número 1 de su promoción.
Emilio (Córdoba 02-03-1890). Catedrático de Ciencias Naturales en Palma de Mallorca.
Convocada a concurso de traslado una de las cátedras de Matemáticas del Instituto Provincial de Córdoba, fue propuesto para la misma por Real Consejo de Instrucción Pública, posesionándose de ella el 11 de agosto de 1884.
Precedido de la reputación conquistada en Figueras, tardó muy poco tiempo en ser designado para el desempeño de la secretaría de ese centro, a partir del curso 1889/90.  Como secretario del centro, leyó las memorias correspondientes sobre el estado del Instituto Provincial de 2ª Enseñanza de Córdoba, en las solemnes aperturas de curso en los cinco que desempeñó tal cargo, memorias que fueron editadas por el establecimiento tipográfico “La Actividad”, de García Lovera 16. Siendo cada vez mejor conocido, le fue conferida la presidencia de aquel Claustro y el ser nombrado por Real Orden, al finalizar el año 1895, Director de aquel Instituto Provincial y del Real Colegio de Nuestra Señora de la Asunción, adjunto.
2. Plaza de las Tendillas

En el Instituto y Colegio de internos, trabajó con solícito afán mejorando el edificio. Terminó la fachada de este Centro a la calle Diego de león y actual Plaza de las Tendillas, cuando al derribo de la antigua casa de los Bañuelos, tan discutida por aquellos años, dio ocasión a que la construcción, terminada en 1868 cuando fue director Don José Muntada, pudieran concluirse totalmente. Mejoró enseres, la biblioteca, los gabinetes, las cátedras y todas las dependencias, desde la sala al comedor, y desde los vestíbulos y patios de entrada hasta los dormitorios, de tal manera que mereció calurosos elogios del Inspector general de enseñanza cuando visitó el establecimiento, causando admiración las mejoras realizadas y de que se pueda sacar tanto partido de la consignación limitada que para material perciben los Institutos. Mejoró la alimentación del internado, aumentó notablemente su número, satisfizo puntualmente todos los gastos, las pensiones que las viudas de los Profesores tienen concedidas con cargo a los sobrantes del Colegio y al mismo tiempo dejó un remanente después de cubiertas todas las atenciones, comprobándose con esto que si fueron grande su inteligencia y su celo, como Jefe y como Catedrático, no desmereció su gestión como administrador de fondos y ordenador de pagos, quedando a gran altura su probidad y su honradez, así como el acierto conquistado con su perseverante trabajo.
Llamado por el Sr. Rector del Distrito Universitario, y deseando adquirir más material para hermosear el Centro de su cargo, aunque hacía varios días que no se encontraba bueno, salió para Sevilla el 26 de septiembre, y aunque se había pretendido disuadirle de su viaje hasta ocasión de mejor salud, ante el temor de que retrasándole interrumpiría sus tareas escolares, porque hay que tener en cuenta que en 28 años de profesorado no quiso obtener jamás ni una licencia, manifestó, sin embargo, decidido empeño en salir y, en efecto, porque su esposa con muy buen acuerdo y ante posibles contingencias, decidió el viaje en su compañía. Feliz acuerdo porque al día segundo de su llegada se inició un terrible ataque que le arrebató su existencia con el solo consuelo de exhalar su último suspiro en brazos de su esposa. En la Memoria anual del Instituto, escrita a raíz de su inesperado fallecimiento, se le tributa un postrer elogio como “ejemplo permanente de dignidad, probidad, aplicación, celo y nobleza de alma”.
De estatura regular, color moreno, enjuto de carnes, ojos negros y expresivos, aspecto bondadoso y profundamente simpático, solícito siempre en atender a cuantos a él se dirigían, complaciente y resignado, de salud esquiva en sus últimos años, por sus acerbos males de estómago y por las incesantes preocupaciones de sus cargos. Aficionado a la caza, tenía un perro setter, animal que notó la falta de su dueño, se refugió debajo de su cama y al cabo de una semana murió de pena. Aficionado a la astronomía. Del noble afán de saber y elevado científico que por aquel entonces existía en el Instituto cordobés da cumplimiento la idea el que en ese mismo año de 1900 un grupo de profesores organizaron una expedición científica a Argamasilla de Alba (Ciudad Real) sin recibir ayuda económica de ningún organismo público ni privado, para obtener datos del eclipse total de sol que hubo aquel año, y que en aquella localidad manchega ofrecía especiales condiciones de visibilidad. Formaron la expedición, junto con el Profesor Rodríguez García, Don Luis Olbés que luego pasó al Instituto San Isidro de Madrid, y el siempre recordado Don Rafael Vázquez Aroca, que aportaron a la oficina internacional, establecida al efecto, el fruto de sus observaciones.
El matrimonio Rodríguez López-Neyra vivió en la calle Barberos, hoy Hermanos López Diéguez s/n donde nació su hijo Carlos, bautizado en la Parroquia de san Andrés, y a finales de 1885 se trasladaron a la calle Valladares nº 20, donde nacieron Luis y Emilio, bautizados en la Parroquia de la Trinidad.
Bibliografía:
 -Rafael Ramírez de Arellano. Escritores cordobeses. Segunda Parte. 1914
-Manuel Burillo de Santiago. Boletín de Instrucción Pública. Órgano de Institutos, Universidades y    Escuelas Especiales. Número 438. Madrid 23 de noviembre de 1900.
-Juan Gómez Crespo. Ascendencia cordobesa de los Rodríguez López-Neyra. Diario Córdoba de 26 de abril de 1970. Colegio de la Asunción de Córdoba, obra de siglos.
-Fotografías:
1. Libro: El Profesor López-Neyra, sabio andaluz. Figura 18
2. Panoramio.com


El Profesor López-Neyra, antiguo alumno del Instituto Provincial de Córdoba

(Artículo de Constantino M. Pleguezuelos. 1998)

  
Celebramos en el presente curso el sesquicentenario de la creación del Instituto Provincial de Córdoba.  
Instituto "Góngora" de Córdoba. Antiguo Instituto Provincial

Nos hemos  dedicado, durante varios años, a estudiar la figura del Profesor López-Neyra.  Sería imperdonable, por nuestra parte, no dar a conocer, aunque sea brevemente, esta figura mundial de la Parasitología, según los Profesores Dougherty y Hall, de las Universidades de Berkeley y Kansas, respectivamente.
Don Carlos Rodríguez López-Neyra de Gorgot, nace en Córdoba el 12 de marzo de 1885, en la calle Barberos s/n hoy Hermanos López Diéguez. Bautizado en la Parroquia de San Andrés, su padre fue Don Manuel María Rodríguez y García, Catedrático de matemáticas y Director del Instituto Provincial. Su madre fue Doña María del Carmen López-Neyra y Deurrieu, natural de Figueras.
Cursa el Bachillerato en el Instituto Provincial de nuestra ciudad, con brillantes notas, siendo alumno, entre otros, del Profesor Vázquez  Aroca. Hace el examen de ingreso en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Sevilla, precisamente cuatro días después de que su padre falleciera en aquella capital.
Don Carlos, a los veinte años era ya Licenciado y Doctor en Farmacia, títulos obtenidos en Madrid con la calificación de Sobresaliente. Poco después es nombrado Auxiliar interino de la Universidad Central. Sin cumplir aún los veintiséis años consigue, por oposición, la Cátedra de Mineralogía y Zoología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Granada. Al suprimirse la disciplina por desdoblamiento, pasó a ser Catedrático de Parasitología Animal en el año 1945, continuando en ese puesto hasta su jubilación, al cumplir los setenta años.

Pensionado para realizar estudios de Parasitología, estuvo trabajando durante más de dos años en el Instituto Pasteur de París, Imperial de Higiene de Berlín, de Zoología de Viena y Munich.
De regreso del extranjero se incorporó a su cátedra de la Universidad de Granada. En condiciones de local penosas y material escaso, tan sólo un microscopio, micrótomo y microscopio simple, y buena voluntad para suplir todo lo que le faltaba, pero trabajó a ritmo acelerado y muchas horas dedicadas  a la investigación, comenzó sus trabajos. Así, en 1918, determinó su primera especie nueva, publicada nada menos que en los Comptes Rendues de la Academia de Ciencias de Francia, comenzando con ello la serie de hallazgos y descubrimientos.
Su fama se fue extendiendo por el extranjero; tanto es así que es nombrado uno de los nueve miembros de la Comisión Internacional de Parasitología de Budapest, en el año 1927, cargo en el que fue reelegido en el Congreso de Padua y posteriormente por el Acuerdo de Lisboa, en 1935. Y lo curioso es que Don Carlos no estuvo inscrito en el primero como congresista, no era partidario de asistir a congresos, opinaba que no podía perder el tiempo en viajes y ese tipo de reuniones. Eso sí, enviaba sus escritos y comunicaciones, y seguía en sus lugares de trabajo, la cátedra y el laboratorio.
Hay que destacar su amistad con el ruso Skrjabin, creador de la Escuela de Parasitología rusa, quien en una de sus obras dedicó 150 páginas a los trabajos del Profesor López-Neyra.
Konstantin Scrjabin
La  Real Academia de ciencias Exactas, Físicas y Naturales premia sus trabajos en los años 1928, 1930 y 1934.
En el año 1947 obtiene el Premio Nacional de Ciencias, por su obra Helmintos de los Vertebrados Ibéricos, tres tomos que forman un conjunto de 1212 páginas y 174 láminas originales, con una completa información naturalista ibérica y amplísima bibliografía de más de 1000 fichas. Dicha obra constituye una síntesis de las observaciones y teorías de nuestro sabio parasitólogo, así como sus aportaciones a la sistemática helmintiana y a la descripción de todas las especies halladas en España.

A propuesta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, en el año 1936, le fue concedido el primer Premio March.
Al cumplir el Profesor López-Neyra sus 60 años, en 1945, sus compañeros y amigos le dedican un libro homenaje. Son en total 21 trabajos de 29 autores. Diez años después, con motivo de su jubilación, se le dedica un nuevo libro homenaje con 67 trabajos y estampan su firma 35 científicos extranjeros de 16 nacionalidades distintas.
En sus 44 años de enseñanza e investigación ha sido cuantiosísima su producción científica, con cerca de 200 publicaciones, de ellas 12 monografías y libros, algunas en colaboración..
El Instituto Nacional de Parasitología se denomina “Instituto Nacional de Parasitología López-Neyra” y tiene su sede en Granada.
El Profesor López-Neyra recibió tentadoras ofertas para marchar al extranjero: Fundación Rockefeller, incluso estando próxima su jubilación, Universidades de Washington, Columbia y Santiago de Chile. Las rechazó todas. No quería salir de “su”  Granada.
Don Carlos falleció en Granada el 1 de septiembre de 1958. Almería le ha dedicado una calle, Granada una plaza y Córdoba una placita con un busto, obra del escultor Ruiz Olmos.
Desde hace 25 años, en la barriada cordobesa del Parque Figueroa, funciona un Instituto de Bachillerato, hoy IES, que lleva el nombre de nuestro ilustre paisano, propuesta que efectuó el entonces Director Don Carlos Pérez de Siles y fue aprobada por gran mayoría. Dicho Centro celebró con varios actos y conferencia el centenario del nacimiento del Profesor López-Neyra. Dicho centenario fue también celebrado en Granada, organizado por la Facultad de Farmacia y el Instituto López-Neyra del CSIC. Intervinieron, entre otros, los Doctores Rultenberg, de Rycke y Schantz. Posteriormente, otro homenaje a Don Carlos se le ha rendido el 22 de junio de 1990. Fue organizado por la Universidad de Granada, el Instituto de Parasitología y la Asociación de Antiguos Alumnos de la Facultad de Farmacia, donde participaron parasitólogos de toda España, desplazados expresamente a Granada. Intervino, entre otros, Paul M. Lizardi, Profesor de Investigación del centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de las Universidades Rockefeller de Nueva York y de Columbia. El Rector de la Universidad de Granada descubrió, en el interior de la Facultad de Farmacia, un busto erigido al ilustre investigador y que perpetúa su memoria.
Y el último ha sido durante el presente curso. El I.E.S. que lleva su nombre, conmemorando sus bodas de plata, organizó una exposición sobre “Vida y obra del Profesor López-Neyra”. Pronunció una conferencia sobre “Mi padre, el Profesor López-Neyra”, Don Manuel Rodríguez Gallego, Catedrático de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada.
Fue Colegiado de Honor del Ilustre Colegio Oficial de Farmacéuticos de Córdoba, así como del de Veterinarios de esta capital. Igualmente Corresponsal de la Real Academia de Córdoba. Con motivo de su jubilación fue designado Consejero de Honor del CSIC, Decano Honorario de la facultad de Farmacia de Granada, Presidente Honorario del Colegio de Farmacéuticos de Granada, Medalla de Oro “Carracido” de la Real Academia de Farmacia de Madrid, Medalla de Oro Mérito al Trabajo, Hijo Adoptivo de Granada, Presidente de Honor de la Asociación Internacional de Hidatosis y Socio de Honor de la Sociedad de Ciencias naturales “La Salle” en Caracas (Venezuela). Anteriormente, en 1953, le fue concedida la Encomienda con Placa  de la Orden de Alfonso X el Sabio.
Y para terminar, mencionaremos las palabras del Profesor Ruiz Giménez, antiguo Defensor del Pueblo:
“La obra del Profesor López-Neyra quedará en caracteres indelebles, como los nombres de Fleming o Pasteur, grabados para la historia de la Humanidad”

sábado, 28 de junio de 2008

En el 50º aniversario del fallecimiento de un hombre de ciencia

El día 12 de marzo de 1.885 nace en Córdoba quien luego llegaría a ser el prestigioso profesor Carlos Rodríguez López-Neyra de Gorgot, hombre de ciencia, catedrático de la Universidad de Granada, investigador científico mundialmente reconocido y, ante todo maestro de muchas generaciones de profesionales y especialistas que le admiraron, siguen admirándole con auténtica veneración, y hoy le recuerdan por lo que fue durante su vida como profesor, como sabio parasitólogo, como amigo incondicional y como incansable formador de discípulos que pudiesen continuar la especialidad científica que él cultivó y de la que era en España el más destacado promotor.
Su extensa labor investigadora se inicia el año 1.905 en la Facultad de Farmacia de Madrid obteniendo el título de doctor, con 20 años. El joven López-Neyra pasa de auxiliar numerario a catedrático numerario en un intervalo de once meses y no contar aún 26 años de edad. Continúa en Granada, ya como Catedrático de Universidad, desde 1.911 hasta el fallecimiento en 1.958, pues si bien alcanzó la edad de jubilación en 1.955, con admirable vocación prosiguió su tarea, puede afirmarse que hasta el último día de tan ejemplar existencia.

En mayo de 1.942, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) eleva la Sección de Helmintología al rango de Instituto Nacional de Parasitología, con sede en la Facultad de Farmacia de Granada, y bajo la dirección evidentemente, de Don Carlos, al frente de la cual ha estado hasta su fallecimiento.

En noviembre de 1.958 "y para perpetuar la memoria del que fue su Director", el CSIC acordó la denominación del Instituto López-Neyra de Parasitología al hasta entonces Instituto Nacional de Parasitología de Granada.

Libro. "El Profesor López-Neyra, sabio andaluz"

El Profesor López-Neyra, sabio andaluz, de Constantino Manuel Pleguezuelos Pleguezuelos.
EDITA: Junta de Andalucía (Consejería de Educación) y CAJASUR.
I.S.B.N. 84-699-0071-4

viernes, 27 de junio de 2008

Reconocimiento Internacional

Este reconocimiento ha sido reafirmado con frecuencia con la dedicatoria por destacados especialistas nacionales y extranjeros, de géneros y especies que han ido descubriendo. Hemos encontrado las siguientes, sacadas de sus dos Libros Homenajes:
  • El Profesor Eduardo Caballero, de la Universidad Nacional de México, le dedica una nueva especie de trematode y la designa "Catadiscus Rodriguezi".
  • Kunwar Suresgh Sing, de la Universidad de Lucknow, India, una nueva especie de nematode, parásito en un miriápodo de aquella zona, "Rhygonema Neyrae".
  • El Profesor Johri, de la Universidad de Delhi, con el material recolectado del intestino de un ave, "Milvus gorinda", crea un nuevo género, el "Neyralla" y la nueva especie "Neyralla kohtaaria".
  • Pérez Vigueras, Profesor Titular de la Universidad de La Habana, designa al trematodes "Stephanostomus lópez-nayrai" huesped del pez denominado catalineta.
  • Jean G. Baer, Profesor de la Universidad de Neuchatel, Suiza, designa una nueva especie de cestode, la "Raillietina nayrai", tenia parásito de la avutarda africana.

(del libro "El profesor López-Neyra, sabio andaluz" de Constantino Pleguezuelos Pleguezuelos)